Cada vez más parejas casadas están optando por vivir en casas separadas para cuidar su relación. Esto surge a partir de una tendencia que se ha hecho viral y es conocida como relaciones LAT (Living Apart Together).
Según varios medios, este movimiento nació de las mujeres feministas que buscan reducir la carga doméstica que tradicionalmente recae sobre ellas.
Al vivir en casas separadas, las parejas pueden mantener su independencia y espacio personal, lo que contribuye a una relación más equilibrada y satisfactoria.
Además, esta práctica permite a las parejas evitar las tensiones cotidianas de la convivencia, promoviendo así una mayor armonía y comunicación en la relación.