Desde lo profundo de la selva, el jefe de las disidencias de las Farc, alias Iván Mordisco, rompió el silencio con un mensaje cargado de acusaciones y advertencias. En su aparición, responsabilizó al Estado por la muerte de 15 menores en recientes bombardeos y anunció “juicios revolucionarios” contra los autores intelectuales y materiales.
Mordisco es uno de los más buscados del país, amenazó al Gobierno y los medios, acusándolos de encubrir lo que calificó como “ejecuciones extrajudiciales”. Aseguró que los menores eran combatientes por la justicia social y no simples víctimas colaterales, como se ha querido mostrar.
La polémica se desató tras un operativo militar en Guaviare que dejó 19 muertos, entre ellos varios menores presuntamente reclutados por grupos armados. La Defensoría del Pueblo y la ONU expresaron su preocupación, mientras la Fiscalía abrió una investigación para esclarecer los hechos.
El presidente Petro, por su parte, defendió la operación militar, alegando que detener los bombardeos solo incentivaría el reclutamiento infantil. Aunque pidió perdón a las familias, dejó claro que la ofensiva continuará.
