Este lunes 13 de octubre, Donald Trump se paró frente al Parlamento israelí y soltó una frase que retumbó en todo Medio Oriente: “No solo es el fin de la guerra, es el fin de la era del terror”. El presidente estadounidense celebró el acuerdo de alto al fuego entre Israel y Hamás, vigente desde el viernes, como un logro histórico que marca el inicio de una nueva etapa en la región. Agradeció la mediación de países árabes y aseguró que “la larga y dolorosa pesadilla” que vivió Israel desde el 7 de octubre había llegado a su fin.
Durante su discurso, Trump también envió un mensaje directo al pueblo palestino, invitándolos a alejarse de la violencia y el terrorismo. “Es su oportunidad de cambiar el rumbo”, dijo, mientras los legisladores israelíes lo ovacionaban de pie por varios minutos. El mandatario estuvo acompañado por su enviado especial Steve Witkoff, su hija Ivanka y su yerno Jared Kushner, quienes han sido piezas clave en los esfuerzos diplomáticos de su administración.
Además, Trump dejó abierta la puerta a un posible acuerdo con Irán, pese a los recientes ataques conjuntos entre EE. UU. e Israel contra instalaciones nucleares en ese país. “Sería grandioso lograr la paz con ellos. Estamos listos cuando ustedes lo estén”, afirmó. Su intervención, cargada de simbolismo y promesas, fue recibida con entusiasmo por el Parlamento israelí, que lo aplaudió como si se tratara de un cierre de ciclo.