Lo que para muchos parecía imposible hoy es una realidad. En las últimas horas la política local dio un giro inesperado: la unión entre el exgobernador de Córdoba, Orlando Benítez Mora, y Gabriel Calle Aguas.
Después de un largo tiempo de diferencias, intrigas y cuestionamientos, los cordobeses nuevamente tienen la oportunidad de ver unidos a Calle y Benítez en torno a una campaña a la Cámara. Este par de guerreros y pilares del Partido Liberal en Córdoba se vuelven a unir para trabajar por los ideales del trapo rojo.
Las diferencias entre ambos se originaron cuando Benítez se negó a apoyar al hoy diputado de Córdoba en su intención de llegar al primer cargo del departamento. Ese fue el detonante para que la amistad llegara a su fin. Desde entonces, Gabriel Calle se convirtió en opositor del gobierno de Benítez Mora, a pesar de haberse desempeñado como secretario de Desarrollo Agroindustrial en su administración.
La amistad, que parecía tan consolidada, se volvió un tormento para ambos y no se veía forma de volver a ser los verdaderos amigos de toda la vida. Ahora, con el lanzamiento de Marta Ruiz Solera, esposa de Benítez, como candidata a la Cámara de Representantes, Calle se mostraba distante.
Sin embargo, como la política es dinámica, a última hora Gabriel Calle, en una decisión tomada junto a su familia, parece haber perdonado la traición de Benítez. Hoy respalda a Marta Ruiz Solera, quien aspira por el partido Colombia Renaciente.
Benítez Mora y Gabriel Calle, después de tantas diferencias, dejan una enseñanza: por política no se debe pelear.
¡Feliz Día de los Inocentes!
