Haben Girma, hija de inmigrantes de Eritrea y Etiopía, se convirtió en noticia mundial al romper barreras que parecían imposibles. Logró graduarse como la primera persona sordociega de la Facultad de Derecho de Harvard, un hecho que marcó un antes y un después en la lucha por la inclusión. Su historia no solo habla de esfuerzo académico, sino de un mensaje poderoso: la discapacidad no define los límites de lo que se puede alcanzar.
Desde entonces, Girma ha dedicado su vida a trabajar como abogada y activista en defensa de los derechos de las personas con discapacidad. Ha colaborado con empresas tecnológicas y organismos internacionales para impulsar la accesibilidad en la educación y en las plataformas digitales, demostrando que la innovación puede ser una herramienta clave para abrir puertas. Su voz se ha convertido en referente global, inspirando a comunidades enteras a replantearse cómo construir espacios más inclusivos.
Pero su vida no se limita a los logros profesionales. Girma también ha mostrado su espíritu aventurero practicando surf y escalada, actividades que refuerzan su mensaje de superación y resiliencia. Con cada reto que enfrenta, deja claro que las barreras se derriban con apoyo, creatividad y determinación. Hoy, su historia sigue siendo un recordatorio de que la inclusión no es un favor, sino un derecho que transforma vidas y sociedades.
