El dirigente político Miguel Uribe Londoño anunció su renuncia irrevocable al partido Centro Democrático, decisión que marca un quiebre dentro de la colectividad fundada por el expresidente Álvaro Uribe Vélez. La salida se produjo tras su exclusión del proceso interno de elección presidencial, lo que generó tensiones y desencuentros con la dirigencia del partido.
En su declaración, Uribe Londoño aseguró que, pese a haber sido miembro fundador, los actuales dirigentes “no reflejan el sentimiento de la inmensa mayoría de militantes que hacen vida en el Centro Democrático”. Además, señaló que solicitó una rectificación que nunca ocurrió y que “el tiempo juzgará quién estuvo del lado correcto de la historia”.
La renuncia se da en medio de una crisis interna del partido, que busca recomponer su unidad de cara a las elecciones presidenciales de 2026. Según versiones periodísticas, Uribe Londoño no descarta alianzas con otros sectores políticos, lo que podría reconfigurar el mapa de la derecha colombiana.
El hecho ha generado polémica en la opinión pública, pues se trata de un dirigente que llevaba años vinculado al uribismo y que ahora se distancia con fuertes críticas hacia la conducción del partido. Su salida deja en evidencia las fracturas internas y abre interrogantes sobre el futuro del Centro Democrático en un escenario político cada vez más fragmentado.
