María Fernanda Cabal, senadora del Centro Democrático y precandidata presidencial, volvió a encender el debate político tras aparecer en un evento público luciendo una banda tricolor similar a la que portan los presidentes electos de Colombia. Aunque no se ha proclamado oficialmente como presidenta, el gesto fue interpretado por muchos como un acto simbólico de poder anticipado, lo que ha generado críticas en redes sociales y entre sectores que cuestionan su respeto por los símbolos institucionales.
El uso de este símbolo fuera de contexto puede considerarse una falta de respeto al protocolo y ha sido calificado por algunos analistas como una estrategia populista para posicionarse como “la presidenta moral” de la oposición. Cabal no se ha pronunciado sobre el hecho, pero su equipo ha intensificado su presencia en medios y redes con mensajes de autoridad, orden y “rescate de la patria”.
Entre sus propuestas más destacadas están la eliminación de la JEP, el fortalecimiento del Ejército y la Policía, la reducción del tamaño del Estado, y una política de “cero tolerancia con el terrorismo y el comunismo”. También ha insistido en que “Colombia necesita mano firme y corazón patriota”, frase que ha convertido en eslogan de campaña. Mientras tanto, la imagen de la banda sigue circulando como símbolo de una candidatura que no teme desafiar los límites del protocolo.