“Mantener el silencio no basta”: El Vaticano exige justicia y libertad para Venezuela

Durante una emotiva ceremonia en la Basílica de San Pedro, el cardenal Pietro Parolin envió un mensaje contundente a Venezuela: el país solo podrá renacer si se construye sobre los pilares de la justicia, la verdad y los derechos humanos. La canonización de José Gregorio Hernández y Carmen Rendiles sirvió como telón de fondo para esta exhortación espiritual y política.

Parolin, quien conoce de cerca la realidad venezolana, instó a los ciudadanos a no dejar pasar este “momento oportuno” para transformar su nación. Inspirado en la vida de los nuevos santos, llamó a romper cadenas de opresión y abrir espacios de convivencia democrática. “Pasar de la muerte a la vida” fue el llamado que resonó desde el altar.

El papa León XIV también se sumó al mensaje, recordando que la santidad no es exclusiva de los altares, sino una vocación compartida por todos. En su encuentro con peregrinos venezolanos, pidió que el ejemplo de los santos canonizados sirva para unir al país en medio de sus dificultades. “Ver al otro como hermano” fue su invitación.

La ceremonia, acompañada por el Coro Simón Bolívar, se convirtió en un símbolo de esperanza en medio de la crisis. El Vaticano dejó claro que la fe no puede ser ajena al sufrimiento social, y que la verdadera transformación de Venezuela solo será posible si se abraza la justicia, la libertad y el respeto mutuo como camino hacia la paz.