En medio de una creciente tensión diplomática con Estados Unidos, el presidente venezolano Nicolás Maduro reveló haber enviado una carta al papa León XIV solicitando su intervención a través de la “diplomacia del Vaticano” para preservar la paz y estabilidad en Venezuela. Durante su programa semanal Con Maduro+, el mandatario destacó la figura del pontífice como un líder “equilibrado y de paz”, continuador del legado de Francisco, y expresó su esperanza de que el Vaticano actúe como mediador en el conflicto geopolítico que se intensifica en el Caribe.
Maduro denunció que el despliegue militar estadounidense frente a las costas venezolanas justificado por Washington como una operación contra el narcotráfico representa un intento de “cambio de régimen” y una amenaza directa a la soberanía nacional. En respuesta, el gobierno venezolano ha reforzado sus mecanismos de defensa territorial y movilizado a más de cuatro millones de milicianos, mientras acusa a EE. UU. de aplicar “pena de mu3rte en altamar” a presuntos narcotraficantes sin derecho a defensa.
Además del llamado diplomático, Maduro subrayó el papel del Vaticano en temas humanitarios, agradeciendo al Papa por su presunta ayuda en el rescate de niños venezolanos que, según él, permanecen “secuestrados” en Estados Unidos. Afirmó que más de 45 menores han sido recuperados, aunque aún quedarían unos 70 por liberar. También mencionó la intervención papal en la liberación de 252 migrantes venezolanos detenidos en El Salvador, destacando la prudencia y sensibilidad del pontífice ante estas situaciones.
La carta enviada al Vaticano busca elevar el conflicto a una dimensión moral y espiritual, apelando al poder simbólico de la Iglesia para interceder ante las potencias mundiales. “Que el Papa abrace a Venezuela con su palabra, con sus bendiciones y con la diplomacia del Vaticano”, expresó Maduro, quien deposita su fe en que León XIV pueda contribuir a una “gran victoria de la paz” en un momento crítico para el país.