Una nueva asonada contra el Ejército se registró en Puerto Guzmán, Putumayo, en medio de un operativo contra la minería ilegal. Según las autoridades, los militares fueron rodeados e insultados por civiles que intentaban despojarlos de sus fusiles. Ante la presión y el riesgo de perder el control de la situación, algunos uniformados dispararon al piso para dispersar a la multitud. En medio de esa acción, un civil resultó herido.
De acuerdo con información oficial, las tropas habían llegado a una mina de oro en plena selva para frenar la explotación ilegal. Sin embargo, su presencia incomodó a quienes se encontraban en el lugar, lo que desencadenó la confrontación.
Este caso se suma a otros episodios recientes de gran impacto, como el secuestro de uniformados en Cauca o el brutal ataque con gasolina contra militares en Putumayo. Ante esta cadena de hechos, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, advirtió que el Gobierno está estudiando protocolos internacionales para manejar choques entre civiles y tropas, sin descartar medidas más estrictas que garanticen la seguridad de los uniformados en terreno.