Una madre en Wisconsin, Estados Unidos, cometió un grave error: se comió el helado de su hijo de 4 años, quien no dudó en llamar a las autoridades para que pusieran orden en la situación.
“Ven a buscar a mi mamá, se está portando mal”, insistió el pequeño durante su llamada. Afortunadamente, la madre pudo explicar la situación a las autoridades, pero ellos decidieron hacer una visita de todas formas.
Al llegar, se encontraron con la divertida escena del niño molesto porque no le dieron helado, sin embargo, decidió no presentar cargos.