Como alcalde, he tenido la oportunidad de recorrer cada rincón de Montería, escuchando a sus habitantes para entender sus inquietudes y necesidades. Esta experiencia me ha enseñado que la verdadera sabiduría radica en observar con atención, comprender y actuar con determinación. En palabras de Miyamoto Musashi, enfrentar nuestros desafíos con un “ojo observador” nos permite ver la realidad sin distracciones. Al estabilizar nuestras emociones, podemos concentrarnos en lo que realmente importa: generar soluciones efectivas a los problemas que afectan a la comunidad.
El 51% de los monterianos señala la falta de empleo como su principal preocupación, y un 25% resalta la necesidad de soluciones en materia de seguridad. Estas estadísticas no son solo números; son un reflejo de la vida cotidiana de nuestros ciudadanos. Sin embargo, como mandatarios locales, debemos ser conscientes de nuestras limitaciones: recursos, tiempo y competencias. Esta realidad nos impulsa a construir un plan de desarrollo que sea pragmático y realista, centrado en lo que podemos lograr en el corto, mediano y largo plazo.
El Plan de Desarrollo “Una Sola Montería: 2024-2028” es un ejemplo de esta visión. Se sitúa en la delgada línea entre la locura y la cordura: lo suficientemente audaz para innovar, pero también lo suficientemente sensato para ser ejecutable. Mi compromiso es que las cosas sucedan, y rápido. En tiempos donde la retórica abunda, nuestra administración se enfoca en la acción. La rapidez, la ejecución y la pertinencia son los ejes que guían nuestra gestión.
Este año, nuestra meta es ambiciosa: dejar en ejecución más de 450 mil millones de pesos en programas y proyectos para finales de 2024. Este esfuerzo no solo es vital para revitalizar nuestra economía, sino que también representa un compromiso con el futuro de Montería. Hasta la fecha, hemos logrado avanzar en la ejecución de 280 mil millones de pesos en proyectos estructurados y contratados bajo esta administración, lo cual es un logro significativo, especialmente al considerar que esta cifra no incluye los proyectos heredados de la administración anterior. Cada peso invertido en el sector público puede generar más del doble en inversión privada, y estamos decididos a aprovechar esta realidad para impulsar el desarrollo de nuestra ciudad.
En materia de empleo, hemos generado 14 mil nuevos puestos, mayoritariamente en el sector del entretenimiento. Nos hemos concentrado en hacer de Montería el epicentro de eventos turísticos, ya sean deportivos, académicos o culturales. Hemos llevado a cabo el Panamericano de Softball Femenino Sub-18, el Colombia Championship y un “Cumpleaños de Montería Diferente”, así como las Fiestas del Río, donde logramos atraer a un 20% de visitantes de fuera de Montería. Octubre será un mes movido en nuestra ciudad, con la Copa Rey Pelé, que reunirá a más de 10 mil niños, y la primera Copa Gamer, donde los pequeños podrán demostrar sus talentos en el Centro Comercial Nuestro. También se llevará a cabo la Ruta Montería-Córdoba, trayendo a más de 1,500 personas. En noviembre, esperamos la Río Media Maratón y una nueva edición de Río de Libros. Y para diciembre, ¡les tenemos preparada una sorpresa: traeremos hielo a Montería!
En cuanto a la seguridad, hemos trabajado arduamente para mejorar esta situación. Para medir la seguridad en nuestra ciudad, existen dos indicadores clave: el primero es un indicador frío de delitos por cada 100 mil habitantes, y el segundo, quizás el más volátil e importante, es la percepción de seguridad. En nuestra administración, nos hemos dedicado a dotar a la Policía Metropolitana con las herramientas necesarias para que puedan cumplir su misión. Un área en la que queremos centrarnos es en la mejora de la calidad de la investigación criminal. Por primera vez, hemos entregado 9 vehículos para fortalecer este aspecto.
Además, logramos instalar un centro de mando, administrado por 19 uniformados de la Policía Metropolitana, que cuenta con 156 cámaras de seguridad y software de inteligencia artificial. También hemos implementado planes operativos, como el Plan Avispa, enfocado en los barrios. Gracias a estos esfuerzos, hoy estamos posicionados como la tercera mejor ciudad en el indicador de hurto, con 215 hurtos por cada 100 mil habitantes, solo superados por Manizales y Sincelejo. En homicidios, estamos en el top 10, con 12.1 homicidios por cada 100 mil habitantes. Para destacar, en el mes de septiembre no se presentó ningún caso de homicidio en nuestra ciudad, lo cual es un avance significativo. Sin embargo, sabemos que esta lucha es inacabable y continuaremos enfocados en seguir mejorando.
En cuanto a la percepción de seguridad, hemos logrado incrementar este indicador al 74.3%. En enero comenzamos en un 57.3%, pero durante el primer semestre del año enfrentamos niveles críticos, alcanzando hasta un 24% en mayo. Aprovecho para agradecer a la Policía Metropolitana, al Ejército y a la Fiscalía por todo el trabajo realizado en beneficio de nuestra comunidad.
Paralelamente, nos hemos dedicado a realizar los estudios y diseños de grandes proyectos durante estos meses de gobierno. Proyectos como el Parque de las Lagunas, las ampliaciones de las rondas (sur y occidente), el muelle turístico del Betancí, la unidad deportiva del Sur Oriente en La Pradera y Canta Claro, el Mercado de los 4 Patios y otros más. Nuestro objetivo es empezar a gestionar los recursos ante la Gobernación de Córdoba, el Gobierno Nacional y la cooperación internacional. No queríamos llegar solamente con ideas a gestionar recursos; “la cara del santo es la que hace el milagro”, dicen por ahí, y en este caso, la “cara” son los proyectos con estudios y diseños en nivel de factibilidad. La tarea para la finalización de 2024 y 2025 es gestionar el cierre financiero de algunos de estos proyectos.
Es fundamental que comprendamos que, para poder tomar decisiones propias y avanzar hacia un futuro sostenible, necesitamos fortalecer las finanzas del municipio. Solo así podremos independizarnos financieramente del gobierno central y garantizar que Montería tome las riendas de su propio destino.
Es importante recordar que no podemos resolver todos los problemas, pero sí podemos priorizar. Gerenciar eficazmente nuestra hermosa ciudad implica tomar decisiones difíciles y estratégicas, enfocándonos en lo que realmente podemos hacer. La formalización del empleo y el desarrollo de un nuevo estatuto de rentas son pasos que estamos tomando para asegurar un futuro más estable para Montería.
En conclusión, nuestro compromiso es claro: trabajar en lo que podemos hacer, ser eficientes y, sobre todo, pertinentes. La transformación de Montería es un proceso que requiere de todos. Juntos, podemos construir un futuro donde nuestras decisiones sean autónomas y nuestras acciones, efectivas. Montería merece un gobierno que no solo escuche, sino que actúe. Cuentan con su Alcalde. ¡Sigamos adelante!