Durante la Final de la Copa América 2024, del pasado domingo 14 de julio, en el Hard Rock Stadium de Miami, Estados Unidos, se produjo un caos debido a que más de 7,000 aficionados colombianos ingresaron al estadio sin boleto.
Afortunadamente, no hubo ninguna tragedia, pero la falta de organización y protocolos de seguridad quedó en evidencia en un evento de esa magnitud.
Las cámaras biométricas instaladas en las zonas cercanas al estadio han permitido identificar a estas personas, que entraron de manera ilegal al partido entre Colombia y Argentina, muchos de los cuales son residentes legales de Estados Unidos y Canadá, y podrían enfrentar sanciones que van desde multas y cargos criminales hasta la revocación de la visa de manera permanente e incluso la deportación.