La tormenta tropical Melissa mantiene en vilo al Caribe colombiano, especialmente a departamentos como Córdoba, Sucre y Bolívar, tras los recientes reportes que advierten su posible evolución a huracán en menos de 48 horas. Los fuertes vientos y lluvias que ya se sienten en la región han encendido las alarmas de las autoridades, que recomiendan máxima precaución ante el incremento del oleaje y las descargas eléctricas.
El Ideam confirmó que el fenómeno natural continúa desplazándose sobre el centro del mar Caribe, con trayectorias inciertas que podrían modificar su rumbo hacia el litoral colombiano. En Montería, los organismos de socorro ya están en “estado de aviso”, preparados ante posibles emergencias derivadas del temporal.
Según reportes del Centro Nacional de Huracanes, Melissa podría convertirse en un huracán “grande y peligroso” debido a las condiciones cálidas del mar y la interacción con corrientes atmosféricas. San Andrés, La Guajira y Magdalena son las zonas más vulnerables hasta el momento, aunque los efectos podrían sentirse en todo el Caribe continental, incluyendo el Golfo de Urabá.
Las autoridades instaron a la ciudadanía a mantenerse informada a través de los boletines oficiales y evitar salir al mar hasta nuevo aviso. En Montería y otros municipios costeros de Córdoba, se han activado los comités de gestión del riesgo para atender cualquier eventualidad.