Este 24 de octubre, miles de usuarios de Bancolombia y Nequi reportaron fallas masivas en las aplicaciones móviles, los cajeros automáticos y el acceso a sus cuentas. Desde las 3:00 a. m., las redes sociales se llenaron de quejas, mientras Downdetector registraba más de 280 reportes en menos de cuatro horas. Las ciudades más afectadas incluyen Medellín, Barranquilla, Cartagena, Bucaramanga, Manizales, Buenaventura y Bogotá. En algunos cajeros se observaban letreros con la frase “Cajero temporalmente fuera de servicio”, confirmando el colapso del sistema.
La respuesta oficial de Bancolombia llegó a las 6:33 a. m., reconociendo una falla en uno de sus servidores y asegurando que el equipo técnico trabaja “sin descanso” para solucionarlo. Sin embargo, esta sería la segunda caída en menos de una semana, y lo más preocupante es que la entidad ya había anunciado un mantenimiento programado para este fin de semana, lo que podría extender el caos digital y dejar a millones de colombianos sin acceso a su dinero justo en días de pago, mercado y obligaciones básicas.
La paradoja es evidente: mientras Bancolombia insiste en mejorar sus servicios, los usuarios enfrentan una cadena de interrupciones que afectan su vida diaria. Nequi, la plataforma que prometía agilidad y autonomía financiera, se ha convertido en un dolor de cabeza recurrente. Y aunque el banco pide paciencia, la confianza se debilita cada vez que el sistema se cae sin previo aviso. ¿Quién responde cuando el dinero no aparece y el cajero dice “fuera de servicio”?.