El presidente Gustavo Petro encabezó una manifestación en la plaza principal de Ibagué, Tolima, en medio de una multitud que lo recibió con música. El evento marcó su regreso a la plaza pública tras la polémica por la cancelación de su visa estadounidense, hecho que aprovechó para reafirmar que no necesita viajar a EE. UU. para hacer política. “No necesito visa para ir a Ibagué”, había dicho en redes, y desde allí lanzó un discurso cargado de referencias históricas, críticas internacionales y autocomparaciones con figuras como Alfonso López Pumarejo.
Aunque había anunciado que hablaría sobre la reforma a la salud, Petro terminó abordando temas como la guerra en Gaza, el fentanilo, la migración y hasta la producción de arroz. También arremetió contra Donald Trump y defendió a Nicolás Maduro, cuestionando el despliegue militar en el Caribe. En medio de su intervención, el mandatario aseguró que su gobierno representa una “Revolución en Marcha” y que el mundo ya no asocia a Colombia con Pablo Escobar, sino con él mismo: “Hoy puedo decirlo, antes me quedaba grande. Ya en el mundo no conocen a Colombia por Escobar… el mundo conoce a Colombia por Petro”.
Sus palabras también generaron reacciones divididas, especialmente por el tono personal y las comparaciones históricas. Mientras sus seguidores lo ovacionaban, sus críticos cuestionaron el enfoque del evento y la falta de profundidad en los temas que realmente afectan a los colombianos. Petro cerró asegurando que su gobierno “está llenando de orgullo a Colombia”.