La Navidad, época de luces y celebraciones, podría convertirse en un oscuro escenario para miles de colombianos. Mientras el Ministerio de Minas y Energía recomienda el uso de bombillas LED, horarios de encendido y fuentes renovables para ahorrar energía en los alumbrados navideños, los gremios del sector eléctrico advierten que el país enfrenta una crisis financiera sin precedentes que amenaza con apagones en pleno diciembre.
Según Asocodis y Andeg, las empresas comercializadoras acumulan deudas por $6,1 billones, de los cuales $2,4 billones corresponden a la opción tarifaria, $2,3 billones a subsidios no girados y $1,4 billones a usuarios oficiales. El 69% de estos saldos se relaciona con entidades públicas, lo que compromete la capacidad de las compañías para comprar energía y garantizar el servicio. En casos críticos, como el de Afinia, la deuda equivale hasta cuatro años de facturación, una presión que pone en jaque la viabilidad del sistema.
La situación es especialmente alarmante en diciembre, cuando el consumo eléctrico se dispara por los alumbrados en ciudades, pueblos y hogares. Los gremios advierten que la falta de liquidez y la ausencia de nuevas capacidades de generación podrían derivar en racionamientos y cortes de energía, justo en la temporada más festiva del año. “Si no disponemos de los recursos necesarios, no vamos a poder honrar nuestros compromisos de compra de energía”, alertó José Camilo Manzur, presidente de Asocodis.
El Gobierno ha anunciado medidas de choque y desembolsos adicionales para 2026, pero los gremios insisten en que la crisis es inmediata y requiere soluciones urgentes. De no resolverse, Colombia podría enfrentar un diciembre a oscuras, con miles de familias afectadas y un riesgo sistémico que amenaza la estabilidad del sector eléctrico en todo el país.
