El presidente Gustavo Petro lanzó una dura acusación contra la fiscal María Fernanda Laborde, quien lleva el caso de su hijo Nicolás Petro. El mandatario, a través de su cuenta de X, señaló que la fiscal no está actuando de manera independiente, sino que estaría en una presunta alianza con la periodista y candidata presidencial Vicky Dávila. Para Petro, todo el proceso judicial contra su hijo es una estrategia de la oposición para hacerle daño a su gobierno.
La controversia se encendió cuando el presidente afirmó que la fiscal le entregó información privada del caso a Dávila antes de que se hicieran públicos los movimientos de la fiscalía. Según Petro, esto demuestra que Laborde está subordinada a los intereses políticos de la periodista. Las palabras del presidente, que se habían mantenido al margen del caso de su hijo, han encendido un debate sobre la independencia judicial y el uso de los procesos penales para la guerra política.
Este escándalo no solo se centra en la relación de la fiscal con Vicky Dávila, sino que también toca otros nombres importantes, como el fiscal Burgos y la exfiscal Marta Mancera. Petro asegura que el caso de su hijo es una «persecución política» con el fin de debilitar a su gobierno. Por ahora, ni la fiscal Laborde ni Vicky Dávila han respondido a estas graves acusaciones, pero lo que está claro es que el tema ha puesto de nuevo el foco en la política colombiana y en las tensiones que existen entre el poder ejecutivo y el sistema judicial.