Cuando faltan solo semanas para que entre en vigencia la reforma pensional del gobierno Petro, un detalle clave sigue en el aire: aún no se ha firmado el contrato entre el Gobierno y el Banco de la República, pieza fundamental para que la entidad empiece a manejar los fondos que llegarán con el nuevo sistema.
Leonardo Villar, gerente del Banco, prendió las alarmas y fue directo: “Llevamos más de un año listos, pero aún no tenemos el contrato firmado para arrancar con lo que nos toca”. Sin ese convenio, el banco no puede contratar a quienes se encargarán de manejar los millonarios portafolios que empezarán a llegar en julio, según lo aprobado en la ley.
Villar subrayó que el tiempo se acaba y que la magnitud del reto exige coordinación urgente si se quiere evitar un tropiezo justo al iniciar la implementación.Aunque desde el Gobierno no ha habido una respuesta concreta tras el llamado de Villar, el panorama genera dudas sobre si el nuevo modelo pensional podrá arrancar en forma o si quedará tambaleando desde el primer día.
