El Pacto Histórico sorprendió a muchos el pasado jueves 25 de septiembre al anunciar que no realizará una consulta interna para elegir a su candidato presidencial de cara a las elecciones de 2026. Esta decisión, que se dio a conocer a través de un comunicado, responde a problemas jurídicos y a la búsqueda de una «política de unidad» que asegure la victoria en los comicios.
La coalición, que agrupa a varios movimientos de izquierda, se ha movido para organizar sus listas al Senado y a la Cámara, pero dejó la elección de su candidato presidencial en el aire. Según el comunicado, el partido considerará otros mecanismos para elegir al representante del «Frente Amplio», una alianza que esperan consolidar con otros sectores políticos. La meta es tener un solo candidato que tenga fuerza para competir en la carrera por la Casa de Nariño.
Esta jugada política ha generado incertidumbre sobre quién será el elegido para suceder a Gustavo Petro. La decisión de no hacer una consulta se debe a que el movimiento aún no se ha consolidado como un partido único ante el Consejo Nacional Electoral (CNE), y la falta de «certezas jurídicas» podría afectar la participación de su candidato. Por ahora, el Pacto Histórico se concentra en las listas al Congreso, mientras el país espera para saber quién será el líder que los representará en las próximas elecciones.