En el complejo escenario político que enfrenta a Estados Unidos y Venezuela, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha vuelto a ponerse del lado de Nicolás Maduro. La tensión escaló cuando Donald Trump, en su discurso ante la Asamblea General de la ONU, amenazó con ataques militares a las redes de narcotráfico que, según él, lidera Maduro. Frente a estas declaraciones, Petro salió a defender al líder venezolano, desatando una nueva polémica.
Petro, fiel a su estilo, usó sus redes sociales para refutar las acusaciones de Trump. El presidente colombiano afirmó que «las mafias son anteriores a Maduro», y que la guerrilla lleva más de 500 años existiendo en Colombia. Con esto, buscó quitarle responsabilidad al régimen de Maduro por el problema del narcotráfico. Además, Petro rechazó la idea de que exista el «Cartel de los Soles», calificándolo como una «excusa ficticia de la extrema derecha» para derrocar gobiernos que no se arrodillan ante ellos.
Desde hace un tiempo, el presidente ha sido un firme defensor del diálogo como la única solución a la crisis venezolana, y ha rechazado rotundamente cualquier idea de una intervención militar. Para Petro, el problema no es Venezuela, sino la «Junta del Narcotráfico» que opera en todo el mundo.