Bogotá vivió una jornada tensa marcada por disturbios y enfrentamientos en medio de una protesta convocada por integrantes de la llamada Primera Línea. En varios puntos de la ciudad se reportaron daños a infraestructura pública, grafitis y choques con la fuerza pública. El ambiente se tornó denso, y las imágenes que circularon en redes sociales mostraron momentos de alta tensión entre manifestantes y autoridades.
La fiscal general Luz Adriana Camargo se pronunció en W Radio, generando revuelo con sus declaraciones. Camargo afirmó que los actos de vandalismo y odio registrados forman parte de la protesta social y que, por ende, deben ser respetados. Su postura ha despertado opiniones divididas, pues mientras algunos defienden el derecho a la manifestación, otros cuestionan si el daño a bienes públicos puede considerarse legítimo dentro de ese marco.
Este episodio ocurrió el lunes 29 de septiembre en distintos sectores de Bogotá, en un contexto de creciente inconformidad social. Aunque no se ha confirmado si habrá investigaciones por los hechos, el pronunciamiento de la fiscal deja claro que el enfoque institucional frente a las protestas está en revisión.