La muerte de Orfa Márquez, contratista de la Alcaldía de Suárez (Cauca) y familiar de la vicepresidenta Francia Márquez, generó conmoción nacional luego de conocerse que falleció tras someterse a una cirugía estética en una clínica clandestina ubicada en Cali. La intervención se realizó el sábado 13 de diciembre y, aunque inicialmente parecía un procedimiento rutinario, terminó desencadenando una emergencia médica que obligó a su traslado a un centro asistencial, donde finalmente murió.
Según las autoridades, Márquez viajó desde su municipio hasta la capital del Valle del Cauca con la intención de mejorar su apariencia física. Sin embargo, el lugar donde fue operada no contaba con habilitación sanitaria ni con las condiciones mínimas de seguridad exigidas por la normativa vigente. La clínica, ubicada en el barrio Ciudad 2000, funcionaba presuntamente de manera irregular y sin supervisión de las autoridades de salud.
El personero de Cali, Gerardo Mendoza, rechazó lo ocurrido y advirtió que el establecimiento no cumplía con los requisitos legales para realizar procedimientos quirúrgicos. Señaló que este caso evidencia fallas graves en la vigilancia de centros que operan sin autorización, poniendo en riesgo la vida de quienes buscan servicios estéticos a bajo costo o con promesas de resultados rápidos.
