En medio de una tormenta diplomática sin precedentes, el presidente Gustavo Petro soltó una frase que dejó a su gabinete en silencio: “Estoy al borde de ser juzgado como narcotraficante por Trump y sus jueces”. La declaración se dio durante una reunión privada en la Casa de Nariño, justo cuando la tensión con Estados Unidos alcanzó su punto más alto. Petro aseguró tener un presentimiento sobre posibles acciones judiciales en su contra, luego de que el presidente Donald Trump lo señalara públicamente como “líder del narcotráfico”.
En los últimos meses, Petro ha mantenido una postura crítica frente a las operaciones militares de EE. UU. en el Caribe, que buscan golpear redes de narcotráfico vinculadas al régimen de Nicolás Maduro. En respuesta, Trump no solo lanzó la acusación, sino que suspendió la ayuda económica a Colombia y aplicó aranceles del 10 %, lo que según Petro rompe de facto el Tratado de Libre Comercio. En redes, el mandatario colombiano insistió en que “no nos asuste ser libres” y que Colombia debe mirar más allá de Washington.
Petro también acusó a Trump y al senador Bernie Moreno de estar detrás de un supuesto intento de golpe de Estado en Colombia. Mientras tanto, la agencia financiera estadounidense estaría revisando las cuentas del presidente y su círculo cercano, lo que podría abrir la puerta a sanciones individuales.