Álvaro Uribe lideró un encuentro donde se escucharon las propuestas de los precandidatos Vicky Dávila y Juan Manuel Galán. Ambos coincidieron en algo clave: estamos en un momento de «todo o nada» y la corrupción se ha vuelto un problema enorme en el país. Sus propuestas son un reflejo de que el sector independiente está buscando soluciones para los desafíos actuales.
En el tema de la seguridad, Galán y Dávila no se anduvieron con rodeos. Galán aseguró que la llamada «paz total» ha sido una «ventaja total» para la delincuencia, que se está adueñando de los territorios. Por su parte, Vicky Dávila fue directa y propuso volver a bombardear y fumigar, además de recuperar la inteligencia y la extradición «exprés». Ambos también señalaron la importancia de restaurar la confianza y darle seguridad jurídica a la fuerza pública, además de apostarle a un Plan Colombia 2.0 de la mano de Estados Unidos.
La conversación también tocó otros temas cruciales, como la salud, la energía y la economía. Ambos candidatos criticaron la forma en que el gobierno actual ha manejado estos sectores y plantearon soluciones audaces, como hacer una auditoría forense al sistema de salud, recuperar la autosuficiencia energética con el fracking y la extracción de gas de mar, y recortar gastos del Estado. Dávila y Galán advirtieron que la relación con EE. UU. se ha puesto en juego por la actitud «irresponsable» del presidente, y que esta situación, que va más allá de un tema de visas, podría tener graves consecuencias para el país.