El sistema educativo venezolano podría quedarse sin nuevos docentes profesionales en siete años, según Tulio Ramírez, director del Doctorado en Educación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB).
La matrícula en las carreras de educación ha disminuido un 76% desde 2008, y los nuevos ingresos han caído un 87%.
Además, el número de graduados se redujo un 88% en el mismo período.
Los bajos salarios son un factor clave en esta crisis. Mientras que el costo de la canasta básica de alimentos supera los 548 dólares, los docentes apenas ganan 93,4 dólares mensuales. Esta situación ha llevado a muchos maestros a abandonar las aulas, agravando la crisis educativa.
Comparado con otros países de la región, los docentes venezolanos enfrentan condiciones laborales mucho más precarias. En Colombia, Panamá, Perú, Argentina, Chile, Uruguay y Ecuador, los salarios de los docentes oscilan entre 400 y 800 dólares, con sueldos que pueden superar los 2.000 dólares para los profesionales con mayor experiencia.
La crisis también afecta el rendimiento académico de los estudiantes.
Datos de la Facultad de Ciencias de la UCV indican que 6 de cada 10 alumnos de nuevo ingreso no aprobaron materia alguna en su primer semestre universitario, reflejando la ausencia de profesores calificados en áreas clave.
Con información de El Nacional