El presidente Gustavo Petro ha subido el tono de su discurso internacional, volviéndose aún más radical un día después de su arremetida contra Donald Trump en la Asamblea General de la ONU. En un evento paralelo en Naciones Unidas, Petro lanzó una frase fuerte: «No solo con palabras se entiende al ser humano», e insistió en la necesidad de crear un «ejército de la salvación del mundo» para frenar los ataques en Gaza, incluyendo aquellos que, según él, provienen de Estados Unidos.
El mandatario colombiano ha calificado el discurso de Trump como «contrario a la humanidad» y «profundamente ignorante y oscurantista», llegando a compararlo con los «tiempos de Hitler». Para Petro, la política de Trump está impulsando el narcotráfico, agravando la crisis climática y creando más guerras. Esta postura tan fuerte busca posicionar a Colombia en un rol de liderazgo en la lucha por la vida y el medio ambiente, pero a costa de tensar al máximo las relaciones con la potencia mundial.
Mientras Petro se radicaliza, la respuesta de Estados Unidos ha sido de bajo perfil. La portavoz del Departamento de Estado, Natalia Molano, declaró que el gobierno de Trump prefiere enfocarse en la «acción» y no en la «retórica» de otros líderes. Esta postura deja claro que, a pesar de las duras palabras de Petro, la Casa Blanca no va a cambiar su estrategia. El presidente colombiano, con su discurso de «guerra ideológica», sigue buscando aliados como Indonesia, que según él ha respondido «sí» a la idea de un ejército de salvación.