El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó este martes una nueva declaración que sacudió el tablero geopolítico latinoamericano. El mandatario aseguró que “muy pronto” comenzarán ataques directos contra cárteles del narcotráfico dentro de territorio venezolano y, en un tono aún más polémico, advirtió que Colombia también sería susceptible de ser atacada o vigilada, al señalar que el país “tiene fábricas enteras de coca¡na”.
Las palabras de Trump se dieron tras un reciente operativo estadounidense contra lanchas en el Caribe, acusadas de transportar droga hacia su país. Según el mandatario, Washington ya tiene identificadas las rutas y los responsables. “En tierra es mucho más fácil. Conocemos las rutas que toman. Lo sabemos todo sobre ellos. Sabemos dónde viven. Sabemos dónde viven los malos. Y vamos a empezar con eso también muy pronto”, dijo ante la prensa.
Aunque Colombia es considerado un aliado estratégico de Estados Unidos en la región, las declaraciones de Trump abren un debate sobre soberanía y seguridad. Al incluir al país dentro de los posibles objetivos de operaciones militares antidroga, el presidente norteamericano tensiona la relación bilateral y pone en entredicho la política antidrogas que se ha implementado durante décadas.
La advertencia de que Colombia podría ser atacada o vigilada como Venezuela genera inquietud en sectores políticos y sociales. Para algunos analistas, la declaración podría ser interpretada como una amenaza directa de intervención militar bajo el argumento de combatir el narcotráfico.
