El gremio de mototaxistas en Montería anunció un nuevo ajuste en sus tarifas: la carrera mínima pasará de los tradicionales $5.000 a un rango entre $7.000 y $10.000 pesos, equiparándose por primera vez con el costo base de un servicio de taxi formal. La decisión, que entrará en vigor en las próximas semanas. Este aumento responde a los precios de insumos como llantas, aceite y gasolina, además de la falta de garantías laborales. “No tenemos primas ni salud, vivimos del día a día”, así lo indicó un vocero del gremio.
Este incremento ha generado inquietud entre los usuarios, quienes ven cómo el transporte informal pierde su principal ventaja: el bajo costo. Mientras algunos cuestionan la calidad del servicio frente al nuevo precio, otros consideran que esta alza podría marcar un punto de quiebre en los hábitos de movilidad de la ciudad.
Con trayectos cortos que ahora costarán lo mismo que un taxi, muchos monterianos se preguntan si es momento de invertir en una motocicleta propia o explorar opciones más sostenibles como las motos eléctricas, que ya comienzan a ganar terreno en otras ciudades del país.
La medida también podría acelerar el debate sobre la formalización del mototaxismo y la necesidad de alternativas de transporte público más eficientes. En una ciudad donde el mototaxi ha sido solución y problema a la vez, el alza tarifaria podría empujar a los usuarios hacia nuevas formas de movilidad, desde la compra de vehículos personales hasta el uso de plataformas tecnológicas que promueven el transporte compartido.