El exministro del Interior Luis Fernando Velasco, recordado por haber participado en 2018 en “El reguetón de la corrupción” junto a otros políticos y creadores de contenido, enfrenta hoy una paradoja que ha desatado indignación y burlas en redes sociales.
El mismo hombre que se mostraba como enemigo del flagelo y que cantaba contra él, fue enviado a prisión preventiva por decisión del Tribunal Superior de Bogotá, en el marco de las investigaciones por el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd).
La magistrada Aura Alexandra Rosero Baquero ordenó medida de aseguramiento intramural contra Velasco, señalado de concierto para delinquir, interés indebido en la celebración de contratos y cohecho. Aunque la defensa apeló la decisión, el exfuncionario deberá permanecer privado de la libertad mientras se define su situación jurídica. El caso también involucra al exministro de Hacienda Ricardo Bonilla, lo que ha encendido aún más el debate político.
En redes sociales, la ironía fue inmediata: usuarios y líderes recordaron la canción que se hizo viral con más de tres millones de reproducciones en YouTube, donde Velasco cantaba frases como “ese cáncer de Colombia que se llama corrupción”. Hoy, esas letras se le devuelven como un boomerang, pues la opinión pública lo señala de haber caído en aquello que juraba combatir.
