Montealegre renuncia como minjusticia, para poder meter a Uribe a la cárcel: “Es un criminal que sigue suelto”

Este viernes, Eduardo Montealegre presentó su renuncia “irrevocable” como ministro de Justicia de Colombia, apenas cuatro meses después de asumir el cargo. En una carta pública, el jurista aseguró que su salida responde a una única razón: la absolución del expresidente Álvaro Uribe en segunda instancia. “Necesito total libertad para continuar a la caza de un criminal que anda, y seguirá, por ahora, suelto”, escribió, anunciando que llevará el caso ante tribunales internacionales.

La dimisión ocurre en medio de una tormenta política y judicial. Montealegre enfrentaba una investigación disciplinaria de la Procuraduría por presunta participación en política, tras calificar de “caricaturesca” la candidatura de Abelardo de la Espriella. El procurador Gregorio Eljach, a quien Montealegre tilda de “funcionario oscuro” y “aliado del abogado mafia”, fue blanco de duras acusaciones en la carta.

Además, Montealegre estaba en el centro de una moción de censura impulsada por el uribismo, tras proponer una Asamblea Nacional Constituyente. La iniciativa, respaldada por Petro, busca reformar las instituciones del país, pero ha sido rechazada por la oposición y sectores independientes. En paralelo, el exministro mantenía una disputa interna con Armando Benedetti, a quien acusó de “fantoche” y de haberle quedado grande el ministerio.

La carta de despedida no escatimó advertencias: “Cuídese mucho: en el Palacio hay traidores que acechan con dagas peligrosas”, le escribió a Petro. Con su salida, el secretario jurídico Augusto Ocampo asumirá temporalmente el Ministerio de Justicia, mientras el presidente define quién ocupará el cargo en medio de una crisis institucional que no da tregua.