La vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, salió al paso de las explosivas revelaciones que la mencionan en supuestos chats de las disidencias de las FARC, lideradas por alias Calarcá. Según un informe divulgado por Noticias Caracol, en esos mensajes se habla de presunta financiación irregular a la campaña presidencial de 2022. Márquez, visiblemente indignada, respondió con un video en el que rechazó categóricamente las acusaciones, calificándolas de “infamias” y asegurando que jamás ha tenido contacto con ese personaje.
En su pronunciamiento, la vicepresidenta enfatizó que “no existe ninguna prueba fehaciente” que la vincule con organizaciones criminales. Para ella, lo que se está intentando es un golpe directo a su imagen y a su dignidad, usando un supuesto mensaje de WhatsApp como arma política. Con un tono desafiante, dejó claro que no se dejará intimidar: “Me están dañando mi dignidad y reputación, pero no lograrán callarme”.
El caso ha desatado una tormenta mediática y política, pues mientras Márquez exige que se adelanten las investigaciones correspondientes, sectores opositores aprovechan la controversia para sembrar dudas sobre la transparencia del gobierno Petro. La vicepresidenta, sin embargo, insiste en que su campaña fue limpia, respaldada por miles de colombianos que creyeron en el cambio, y que jamás recibió apoyo de grupos ilegales.
