Daniel Quintero, exalcalde de Medellín y actual precandidato presidencial, enfrenta un caso por presunta corrupción que ha generado gran controversia. La Fiscalía General de la Nación lo ha acusado formalmente por varios delitos, entre ellos peculado por apropiación, prevaricato e interés indebido en la celebración de contratos. La investigación se centra en la restitución irregular de un lote llamado Aguas Vivas, cuyo precio habría sido inflado desde 2.700 millones de pesos a 48.000 millones durante su administración entre 2021 y 2024.
En un video reciente, Quintero desafió públicamente a la Fiscalía, argumentando que no fue él quien firmó ciertos documentos, sino su antecesor Federico Gutiérrez, popularmente conocido como «Fico». Además, afirmó que el predio en cuestión está ubicado en una zona rural y no urbana, intentando desmentir parte de las acusaciones.
El político asegura que detrás de este proceso judicial hay una intención política para sacarlo del camino hacia la Presidencia, ya que considera que es el único capaz de «resetear» la política corrupta del país y ganar en primera vuelta.
El llamado a juicio representa un punto crítico en la carrera política de Quintero, quien busca consolidarse como el candidato único del progresismo colombiano liderado por Gustavo Petro. La audiencia de lectura de acusación está programada para realizarse dentro de los próximos dos meses, y se espera que el caso atraiga aún más atención mediática y política.