El Tribunal Superior de Bogotá revelará si mantiene, modifica o revoca la condena contra el expresidente Álvaro Uribe. La audiencia virtual comenzará a las 8:00 a. m. y definirá el futuro legal de una de las figuras más influyentes del país. La expectativa nacional es máxima.
Uribe fue condenado en primera instancia a 12 años de prisión domiciliaria por presuntamente manipular testigos y alterar procesos judiciales. La sentencia también lo inhabilitó para ejercer cargos públicos y le impuso una millonaria multa. El fallo lo señala como autor intelectual de maniobras ilegales para desacreditar testimonios clave.
La defensa del exmandatario apeló, alegando falta de imparcialidad y violaciones al debido proceso, especialmente por interceptaciones telefónicas sin orden judicial. Aunque la condena fue firme, Uribe permanece en libertad gracias a una tutela que suspendió la reclusión. Legalmente, sigue siendo inocente hasta que se agoten todos los recursos.
El fallo de segunda instancia podría confirmar la condena, reducirla o absolverlo por falta de pruebas. Cualquiera sea la decisión, podrá ser llevada ante la Corte Suprema. Este proceso marca un hito en la historia judicial colombiana, abriendo el debate sobre la responsabilidad penal de los expresidentes y el alcance real de la justicia.