Un video que circula en redes sociales ha tocado fibras sensibles en plena temporada decembrina. En las imágenes se ve a un padre que, noche tras noche, llega al parque donde solía jugar con su hijo, hoy fallecido. Allí, frente a un columpio vacío, revive esos momentos que la vida le arrebató, convirtiendo la rutina en un acto de amor que ha conmovido a miles de personas.
El clip, grabado recientemente y compartido por vecinos del lugar, muestra cómo el hombre se sienta al lado del columpio, como si su hijo aún estuviera allí. Lo que para algunos es simplemente el viento moviendo la estructura, para otros se ha transformado en una señal de conexión espiritual. “Es el alma del niño que vuelve a jugar con su papá”, escribieron usuarios que difundieron la escena, generando un intenso debate sobre fe, duelo y esperanza.
La reacción no tardó en multiplicarse: cientos de comentarios expresan empatía y aseguran haber sentido experiencias similares con seres queridos que ya partieron. Más allá de las interpretaciones, el caso refleja cómo el dolor se convierte en memoria viva y cómo, incluso en ausencia física, el amor sigue siendo un puente que une corazones.
