Milvia Niño, una madre colombiana, tomó una decisión que pocos se atreven a enfrentar: vendió todos sus bienes para salvar la vida de su hijo Daniel Cubides, de 24 años, a quien le detectaron tumores en el pecho. La primera cirugía, con un costo cercano a los 300 millones de pesos, no podía ser cubierta por el sistema de salud colombiano, que según ella solo ofrecía cuidados paliativos. Por eso, se trasladó con Daniel a México, donde un especialista les dio una nueva esperanza.
Gracias a donaciones, Milvia logró reunir cerca de 100 millones de pesos para cubrir el viaje y la atención médica inicial. La intervención fue un paso importante, pero no definitivo. Ahora, Daniel necesita una segunda cirugía que podría mejorar significativamente su calidad de vida, pero los recursos se agotaron. La familia enfrenta nuevamente una carrera contra el tiempo, esta vez sin respaldo económico.
Milvia hizo un llamado público a través de redes sociales, pidiendo apoyo para continuar el tratamiento. “Cada aporte se transforma en vida, en tiempo, en esperanza”, expresó con la voz entrecortada. Su historia ha tocado el corazón de muchos, y hoy se convierte en símbolo de lucha, fe y amor incondicional. Mientras tanto, Daniel sigue esperando una nueva oportunidad para seguir adelante.