Armando Benedetti rompió el silencio en medio del escándalo que lo tiene contra las cuerdas. El ministro del Interior aseguró estar viviendo una de las peores etapas de su vida tras su inclusión en la temida Lista Clinton, junto al presidente Gustavo Petro y la primera dama, Verónica Alcocer.
Visiblemente afectado, Benedetti reconoció que su ánimo “está en cero” y que el golpe moral ha sido devastador para su familia. Confesó que el lunes ni siquiera tuvo fuerzas para trabajar y que su esposa “está muy golpeada” por todo lo que está ocurriendo. “Los que me odian hoy pueden cantar victoria”, lanzó con resignación.
El funcionario, que ha sido pieza clave en el Gobierno y figura polémica desde los audios que lo enfrentaron con Laura Sarabia, ahora busca abogados internacionales para limpiar su nombre. Asegura que no tiene cuentas en Estados Unidos ni secretos que puedan comprometer al presidente Petro.
Mientras tanto, crecen las especulaciones sobre lo que realmente sabe del mandatario. Benedetti insiste en que su papel fue político y no financiero durante la campaña, pero en redes muchos creen que podría ser el eslabón más débil de una historia que apenas comienza.