El presidente Petro no se quedó en el hotel ni en los pasillos de la ONU, agarró un megáfono y se unió a las protestas contra Benjamin Netanyahu y la guerra en Gaza, desatando una tormenta política internacional.
En medio de banderas palestinas y pancartas con la cara del primer ministro israelí, Petro lanzó un discurso explosivo, pidió crear un “ejército de libertad más poderoso que el de Estados Unidos e Israel juntos” para salvar a Palestina.
“Hay mucha sangre árabe en Colombia. Por eso estamos unidos a esta causa”, dijo el mandatario, mientras lo traducían al inglés para que los manifestantes lo entendieran.
El presidente ya había encendido las alarmas el martes en la ONU, cuando propuso “unir ejércitos y armas” para liberar Palestina. Pero ahora lo gritó en la calle, acompañado del músico Roger Waters, símbolo del activismo propalestino.
La escena dejó a todos boquiabiertos y dividió opiniones: para algunos es un acto histórico de solidaridad; para otros, un desafío directo a Estados Unidos e Israel en su propia casa.