Laura Gallego, exseñorita Antioquia, se convirtió en el centro de una polémica nacional tras publicar en redes sociales videos en los que preguntaba a sus seguidores “a quién darle b4la” entre el presidente Gustavo Petro y el exalcalde Daniel Quintero.
Las declaraciones, que generaron rechazo por su tono violento, provocaron que el Concurso Nacional de Belleza se pronunciara oficialmente, aclarando que no participa en política ni respalda pronunciamientos de sus aspirantes. Como consecuencia, Gallego presentó su renuncia formal al título, alegando que no aceptaría ser silenciada por los estatutos del certamen.
La controversia se intensificó cuando comenzaron a circular rumores sobre una posible aspiración política de Gallego, alimentados por sus entrevistas con figuras como María Fernanda Cabal y Juan Carlos Pinzón. Sin embargo, la exreina negó tener intenciones de lanzarse al Senado en el corto plazo. “No tengo ni he tenido aspiraciones políticas a corto plazo; en este momento estoy enfocada en mis proyectos profesionales”, afirmó, aunque dejó abierta la posibilidad de involucrarse en el futuro.
En su carta de renuncia, Gallego defendió su derecho a opinar sobre temas políticos y criticó lo que considera una visión arcaica del rol de las mujeres en espacios públicos. “Me niego a que una corona se convierta en mordaza”, escribió, reafirmando su postura como mujer con criterio y voz política. Aunque por ahora descarta una candidatura, su activismo y presencia mediática han dejado claro que su participación en el debate público continuará, incluso fuera de los escenarios tradicionales de la belleza.