Desde el pasado 14 de diciembre, cuando el ELN inició una nueva ofensiva armada, las regiones del Cauca y el Cesar han sido escenario de enfrentamientos que han dejado un saldo de heridos, desplazamientos masivos y daños a la infraestructura pública. Peajes incinerados, estaciones de policía atacadas y comunidades enteras bajo zozobra han marcado unas fechas que deberían estar dedicadas a la unión familiar y la celebración navideña.
La violencia ha consternado al país, pues en medio de la expectativa de una Navidad tranquila, muchas familias han recibido la noticia de que no volverán a ver a sus seres queridos. Este panorama ha generado fuertes cuestionamientos hacia el gobierno de Gustavo Petro, con voces que señalan la falta de seguridad y aseguran que hechos de esta magnitud no se veían en años anteriores.
En medio de la crisis, el debate político se intensifica. Algunos sectores han mostrado respaldo al senador Iván Cepeda, figura de izquierda que en el pasado participó en negociaciones con cabecillas de las FARC. Su influencia en el escenario político despierta polémica, pues mientras el país enfrenta el fuego cruzado de la guerrilla, parte de la ciudadanía considera darle su voto de confianza en las próximas elecciones.
