La visita del presidente colombiano Gustavo Petro a Nueva York no ha pasado desapercibida, sobre todo por sus polémicas declaraciones que han generado un debate. Petro, en un mensaje que se ha interpretado como un abierto desafío al gobierno de Donald Trump, hizo un llamado a los militares estadounidenses para que «desobedezcan» las órdenes de su comandante en jefe. Este llamado ha provocado una fuerte reacción, con opositores pidiendo directamente a las autoridades de EE. UU. que investiguen al mandatario por conspiración.
En su intervención, Petro calificó las operaciones militares de EE. UU. en el Caribe como «un acto de tiranía», mientras defendía a quienes iban a bordo de lanchas que fueron derribadas por las autoridades de ese país. Además de su llamado a la desobediencia, el mandatario propuso crear un ejército internacional para, supuestamente, proteger a la población civil en zonas de conflicto, algo que sus críticos han calificado como una amenaza directa a Estados Unidos.
Políticos de la oposición y críticos del gobierno de Petro, lo han tildado de «defensor de terroristas» y «narcotraficantes», y han pedido al senador estadounidense Marco Rubio que investigue al presidente colombiano por conspirar contra el gobierno de EE. UU.