Luego de la muerte de una niña discapacitada de 7 años en Barranquilla, que murió, precisamente esperando un traslado por parte de la entidad de salud EPS Coomeva a la que estaba afiliada para mantenerse con vida.
Según sus allegados, la clínica a la que ingresó por una urgencia médica nunca determinó si se trataba de un dengue hemorrágico o leucemia. Lo cierto es que la institución no contaba con una UCI pediátrica que pudiera atender su caso.
Por ello, su madre, acudió a Rosalba Amaranto, representante legal de la asociación para niños con discapacidad que atiende esta población en Barranquilla, buscando un apoyo para que Coomeva EPS aprobara el traslado de la niña a una institución médica que contara con la UCI que la pequeña requería.
Sin embargo, no se logró, la asociación que atiende niños en estas condiciones en la ciudad, aseguró que otros dos menores habrían muerto por mala prestación del servicio.
Por su parte, Emma Arias, quien también pertenece a esta fundación, manifestó su preocupación frente a la muerte de dos menores en condición de discapacidad a causa de las negligencias por parte de esta EPS.
Aunque la pequeña fue diagnosticada con agenesia del cuerpo calloso, hidrocefalia y epilepsia, familiares y miembros de la asociación aseguran que su deceso no está relacionado directamente con su condición de discapacidad.