En las últimas horas de este jueves 20 de diciembre, el director de Medicina Legal, Carlos Valdés, anunció la renuncia de su cargo.
De acuerdo con declaraciones de Valdés, su renuncia se dio como consecuencia del escándalo por las pruebas del caso de Jorge Enrique Pizano, excontroller de la Ruta del Sol II.
“He presentado mi renuncia el día de hoy porque mi trabajo de 8 años al frente del instituto no tiene por qué verse manchado. A Colombia le entrego un instituto con alta calidad científica y con unos peritos honestos. Es el director el que cometió el error”, señaló el exdirectivo.
El mismo Valdés reconoció que las muestras que le tomaron a Pizano no eran las ideales, pues al realizar una segunda interpretación del estudio forense de Jorge Pizano concluyó que había encontrado sangre en una toalla, pero después se estableció que el «examen de Medicina Legal concluye que la sangre en la toalla encontrada en el allanamiento a casa de Jorge Pizano, no corresponde a sangre humana».
«Quiero reconocer ante todos, hoy, que solo conocí el texto a mediodía. Este informe tiene toda la validez de los peritos y soy el único responsable de haber afirmado a la opinión pública que la mancha de que trata ese informe era una mancha de sangre humana. Soy el único responsable. Mi equivocación obedeció a que por las características iniciales de la mancha asumí que se trataba de una mancha de sangre», señaló.
Finalmente, el funcionario reiteró que «el error fue suyo y que la credibilidad del Instituto de Medicina Legal no tiene por qué ponerse en duda».